Liliana Rincón
Gómez Palacio, Durango (22/12/2017).- En México hay un problema muy fuerte y lacerante que es la violencia y no podemos, sin haberlo atacado, irnos a discutir el aspecto técnico que representa la ley de seguridad interior, consideró el Obispo de la Diócesis de Gómez Palacio, José Fortunato Álvarez:
Puede haber ley o no haber ley, no es lo más importante, lo más importante es ver qué está haciendo cada quien para combatir la violencia lacerante que es una herida profunda que tiene el pueblo de México, qué está haciendo la sociedad, los organismos de derechos humanos, los políticos, la sociedad entera para abonar y bajar el tema de la violencia».
Comentó que el origen de la discusión sobre la militarización del país fue la voz de la sociedad que solicitó regular la intervención del ejército.
Consideró que las estadísticas son impresionantes, pues con o sin ley de seguridad interior, siguen presentándose asesinatos, feminicidios, violencia, y enfrentamiento de grupos armados:
Ese es el punto y México sigue sufriendo, y viviendo el tema de violencia, la ley es un aspecto para reglamentar el problema militar, pero sigue habiendo un problema más profundo; tenemos que volver el debate a la realidad y ver lo que cada quién está haciendo para combatir la violencia», aseveró.