El reciente desencuentro entre el Ayuntamiento de Torreón y el gobierno de Coahuila puso en evidencia la importancia de la claridad en la línea de mando dentro de las fuerzas de seguridad. La decisión del alcalde Cepeda de dar de baja a un centenar de efectivos del Grupo de Reacción Torreón que pertenecían a la Policía Estatal, argumentando un “respeto a la autonomía municipal”, generó cierta tensión política que amenazó con desestabilizar la seguridad en el municipio.
La falta de claridad en la línea de mando es un problema recurrente en muchas organizaciones, y el GRT no es la excepción. La cadena de mando es esencial porque establece la estructura y define los límites de autoridad y responsabilidad en cada nivel. En el caso del GRT, la aparente opacidad parece haber generado un conflicto de autoridad que afectó la operatividad del grupo. Una jerarquía clara ayuda a evitar la confusión y asegura que las decisiones se tomen de manera oportuna y coherente.
La decisión dio pie a tensiones entre el gobierno municipal y estatal, exacerbadas por grupos regionalistas en Saltillo y Torreón, donde las percepciones y reacciones fueron, en algunos casos, desmesuradas. Sin embargo, a pesar de ello, la conversación entre el estado y el municipio se mantuvo constante, lo que permitió superar el impasse. La situación resalta la importancia del diálogo y la coordinación entre ambos niveles, claves para resolver conflictos políticos y mantener la estabilidad entre niveles de gobierno autónomos entre sí.
Desde la época del Imperio Romano, se recuerda la máxima que afirma: ‘el esclavo de dos amos es un hombre libre’. En efecto, la falta de precisión en la línea de mando puede llevar a un desgobierno que habría que evitar a toda costa. En este contexto, es crucial priorizar el bien común de Coahuila, poniendo la seguridad por encima de los desacuerdos. Este tema no debe ser politizado ni partidizado; en cambio, debe ser el resultado de un trabajo en equipo entre todos los niveles de gobierno.
Definitivamente amigo radioescucha, la tensión entre el Ayuntamiento de Torreón y el gobierno estatal resalta la necesidad de una mayor claridad en la línea de mando y una mejor colaboración entre los diferentes órdenes de gobierno. La seguridad de nuestra entidad es, por lo mucho que nos costó, nuestro bien más preciado y por ello, lo que más debemos cuidar.