López Obrador, con una agenda bastante menos cargada: Gibrán Ramírez Reyes

Claudia Martínez Martell

Torreón, Coahuila (02/11/2022).- Hoy escuchamos en Contextos a Gibrán Ramírez Reyes, politólogo, militante de Morena y articulista, quien habló de su colaboración ‘¿Quién gobierna?’ .

Respecto a cuál es el planteamiento que hace en este artículo, señaló que durante mucho tiempo se ha generado una imagen de López Obrador como un hombre incansable, debido a su actuación como jefe de gobierno del Distrito Federal, ahora Ciudad de México, con sus conferencias desde las 6 de la mañana, para después, durante todo el día, reunirse con su gabinete, incluso, con sus directores de áreas y funcionarios intermedios para contrastar la información que le daba su secretaria, para no quedarse con lo que tenía.

Creo que esta imagen, muchos la proyectamos, hicimos una especie de mitología alrededor del presidente López Obrador, sin tomar en cuenta lo que trae el paso del tiempo como el envejecimiento, las enfermedades y también el cambio de carácter desde entonces; pero los papeles de la Sedena nos han permitido constatar que la agenda está bastante menos cargada, que acuerda con secretarios o manda acordar al secretario de gobernación, es decir, tenemos un presidente que delega mucho y que tiene poco contraste de la información que le acercan”, comentó.

Por su puesto, dijo, sigue supervisando las megaobras y programas sociales, que han sido sus prioridades, pero, entre tanto, alguien tiene que tomar decisiones operativas y la pregunta es ¿Quién? porque al que se eligió democráticamente, fue a Andrés Manuel López Obrador. Se habla de varios personajes, como Luis Crescencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, que es quien decide muchas cosas; antes, se decía que Julio Sherer; ahora, el secretario de Gobernación Adán Augusto López, algunos familiares del presidente y hasta su secretario particular Alejandro Esquer. Estas figuras, han reproducido una lógica que se empezó a acusar en la presidencia mexicana desde, quizá, el gobierno de Miguel de la Madrid.

Y es que, explicó, se tenía una presidencia de la República muy fuerte y estructurada que generó el mito de que al presidente “nada se le iba de largo”, probablemente, el auge de esa institución presidencial, surgió con Luis Echeverría, donde había un control extremo de los aparatos del poder desde la presidencia. Después, empezó a cambiar, ya en el sexenio de la Madrid dominaba el ego, las vanidades, los intereses y los negocios:

Creo que ese descontrol se está observando actualmente en el gobierno de la República, y que, quizá, estaba fuera de la discusión pública porque no teníamos acceso, ya que aunque las agendas de los jefes de estado deben ser públicas y las reuniones deben estar institucionalizadas, en México no era público y ni estaba institucionalizado y ahora vemos que eso permite una flexibilidad muy importante que el presidente deja al relajar esa agenda de instrucciones y supervisión, que son las dos tareas básicas de un jefe de gobierno”, precisó.

Lo invitamos a escuchar la reflexión completa del politólogo Gibrán Ramírez Reyes, quien también habló de lo que se espera para los dos últimos años del gobierno morenista…

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