Los derechos de agua que están en manos de los ejidatarios alcanzan apenas el 12 por ciento del total, pues el resto fueron vendidos, transferidos o no son trabajados por gente del sector social
Los derechos de agua que están en manos de los ejidatarios alcanzan apenas el 12 por ciento del total, pues el resto fueron vendidos, transferidos o no son trabajados por gente del sector social