Queda demostrado, una vez más, que López Obrador no es un demócrata, lo que queda claro con actos en los cuales exhibe en forma recurrente su desprecio por el estado de derecho
Queda demostrado, una vez más, que López Obrador no es un demócrata, lo que queda claro con actos en los cuales exhibe en forma recurrente su desprecio por el estado de derecho